El pepino es una planta anual que alcanza el metro de altura y que tienes su origen en la India. Sus hojas son grandes y amplias, a diferencia de la planta del melón los tallos de esta hortaliza están repletos de pequeños pinchos.
Para el cultivo del pepino la luz solar es muy importante, cuanto más horas de luz mayor cosecha conseguiremos.
Las temperaturas idóneas para esta hortaliza oscilan entre los 25ºC diurnos y los 15ºC nocturnos. Esta planta no tolera las heladas.
Algo que debemos tener en cuenta para que el desarrollo de esta hortaliza sea óptima, es la humedad relativa del aire que debe ser muy alta. Las hojas del pepino tienen una superficie muy grande y su nivel de transpiración es muy alto, por eso la humedad debe de ser elevada para prevenir la deshidratación de la planta.
El pepino se adapta fácilmente a casi cualquier terreno siempre que no le falte nutrientes y tenga un drenaje adecuado.
El riego debe de ser moderado, el equilibrio en el aporte de agua de esta hortaliza es básico. Cuidaremos no regar en exceso, ni demasiado poco. Tampoco dejaremos muchos días sin hidratar la tierra.
Es muy exigente con el abono. Además de los nutrientes básicos que requieren todas las hortaliza, es muy sensible a la carencia de calcio y a la escasez de microelementos.
Al ser una planta que alcanza cierta altura, y la cantidad y peso de sus frutos puede ser importante, el pepino se debe entutorar. Para ello podemos utilizar las habituales cañas entrelazadas o instalar un enrejado que es muy práctico para este tipo de cultivos.
Los ataques más importantes que sufre son los típicos de la mayoría de las hortalizas: orugas, gusanos, mosca blanca, enfermedades fúngicas, bacteriosis y diversos virus.
Las semillas se pueden sembrar directamente en el terreno o bien utilizar semilleros para su multiplicación. Si tenemos riesgo de heladas en nuestra región es mejor plantar los plantones una vez el riesgo haya remitido.
Cuando llega el momento de recolectar los frutos, tener en cuenta que no debemos dejar que se vuelvan amarillos, por que la planta puede que detenga su producción.
1 comentario:
Que ganas tengo de empezar a recolectar, sobre todo el pepino. Os voy a dejar una receta fácil, fácil y sobre todo rica, rica. Aparte de lo bueno que está en los gazpachos, las ensaladas, os pido que probéis esta y ya me contáis.
CREMA DE PEPINO
INGREDIENTES:
2 pepinos medianos,
melón (2 rodajas, mejor de la marca Bollo)
2 yogures muy cremosos tipo griego
4 quesitos,
menta fresca
aceite de oliva,
Sal y pimienta blanca
ELABORACION:
1º.- Pelar los pepinos, quitar las pepitas y cortar en trozos
2º.- Hacer lo propio con el melón
3º.- Triturar en la batidora el pepino y el melón
4º.- Añadir después los yogures, los quesitos, la menta, un buen chorro de aceite, pimienta y sal y seguir batiendo, si vemos que queda muy espesa, añadimos un poco de agua
5º.- Meter en el frigorífico durante un par de horas mínimo y servir muy frío.
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